Nadar.

Hice un cenicero con un vasito tequilero y las cenizas del cigarro se ahogaron en el agua, como cuando nos ahogamos en sentimientos.

Desde que no estas solo se escribir de ti

Estoy buscandome en este viaje pero en los bolsillos de mi chaqueta siempre apareces en el momento menos esperado, abro mi corazón y estas allí saludando. 

El mejor momento del dia es bajo la madrugada, cuando podemos encontrarnos, te beso aunque no puedo olerte, mis dedos recorren tu piel y no quiero creer que es verdad porque en el fondo tengo miedo de despertar de nuevo en el vacío del concreto; tu pintaste estas paredes y para mi es un infierno, aqui donde vinimos a construir un hogar, tu ropa sigue donde siempre esperando que tu mano le quite el polvo, esperando tus manos para sentir calor. 

Lo que fuimos

Subí a la azotea y llegaste a mis recuerdos, te encontré señalando constelaciones y algo en mí podía recordarme antes de mi nacimiento, acostumbrado al vació y al frío universo, mi memoria me decía que tu estabas junto a mí siendo infinitos sin conciencia, aún no nos encontrábamos en este sueño que llamamos vida, un segundo después estaba de nuevo en la azotea mirando el firmamento, mirando el recuerdo de lo que alguna vez fuimos. 

¿Quién eres tu?

Llegué a ese trabajo nuevo con mucha ilusión pensando que en este punto el desvelo y el esfuerzo por fin valían, cumpliendo sueños, alcanzando a tener una probada de eso que todos llaman "el éxito" y en el fondo un poco de esa búsqueda de reconocimiento que nace desde que eres niño y los adultos esperan algo de ti. 

La jefa se presentó, me indicó mi lugar y los textos que tenía que revisar, me emocionó ver ese escritorio limpio y sin historia que podría hacer de el mi sitio, ya estaba pensando en traer mi taza favorita, un porta retratos con su foto y una minúscula macetita con una suculenta. 

Cuanto comencé a instalarme me dí cuenta de los detalles en el escritorio, pequeñas historias contadas a través de manchas de tinta, barniz de uñas y algunas marcas de antiguos empleados, no pude evitar imaginarme cuantas historias podía contar ahora ese escritorio. 

El día pasó y todo iba muy bien hasta que te vi, sentí un latir acelerado y juro que podía escuchar el tuyo. 

Siempre tuve debilidad por el cabello rizado, me recuerda a los giros del humo del cigarro, creía que conocería el amor en un parque o en una sala de espera de autobuses, pero te encontré allí sin ser extraordinario, en el comedor de una de las miles de oficinas grises de la ciudad.

No reías pero tenías la sonrisa de alguien que sueña y ese golpetear nervioso de tu pulgar izquierdo. 

Ojalá mis decisiones me hubieran llevado a otro sitio, a cualquiera menos a este, pero se que las olas siempre llegan a la costa para destruirse y volver al océano. 

Jugar a ser cometas en Domingo

¿Crees en las casualidades o en el destino? Mi corazón se siente vacío y por alguna razón últimamente llama tu nombre. Tal vez sea el recuerdo y la nostalgia de aquellos días en los que no existía el futuro que ahora vivo, solo nos quedaba el ahora y la fantasía. Tal vez sea solo la sensación de soledad y necesidad de contacto humano, pero sabes…debe ser algo más, tal vez solo quiero hablar con alguien de universos paralelos y tormentas y olvidarme de que la vida deba o no tener algún sentido.

EOL

El amor es lo único que tiene sentido, en esta ironía llamada vida.
Sin amor, qué seriamos? el amor es el impulso que mueve al universo.
El amor nos conecta, nos hace fluir como los ríos.

En la oscuridad de la soledad encontré un hilo rojo que envuelve mi corazón

Me causa un dolor en el pecho y me detiene la respiración

El otro extremo llega a ti

Cada vez más lejos, presionando 

Causando una yaga

Unida a ti hoy y siempre 

Conectados por el amor. 

La balacera

Sentí que morí, me asusté y corrí, sin voltear atrás olvidé el pasado y no volví nunca.

Andábamos ya muy asoleados y cansados, unas personas nos ofrecieron pasar la noche allí.

Anocheció, contábamos chistes y reíamos disfrutando la juventud que en ese momento creíamos eterna. Comenzamos a prepararnos para dormir, ya estábamos listos cuando quise salir a ver un rato las estrellas para despedirme de ellas y de mis tristezas, llegué al jardín y de pronto llegaron hombres de uniformes con muchas armas, solo grité ¡AL SUELO! entré corriendo para protegerme y protegerlos a ellos, vi los cuerpos caer de uno en uno, mientras otros se hacían los muertos, me escondí debajo del fregadero hasta que no se escuché ningún ruido, después de eso solo puedo recordar el olor a sangre y el silencio. 

Nos mataron, porque ellos nunca pierden, pero nosotros tampoco perdimos, morimos con nuestros sueños y pasiones intactos, luchamos hasta el final sin derrotas, de pie y no de rodillas. En el viento quedan nuestros ideales, rescátalos, no nos olvides, sal y lucha. Lucha siendo feliz aunque el mundo diga lo contrario, lucha por tu causa demostrando que ser diferente, que ser mujer, ser indígena, ser homosexual, ser joven, es SER LIBRE.